jueves, 26 de enero de 2012

Podría contarte historias escritas sobre estas cuatro paredes, de como las sábanas se arrugan y las guitarras se desafinaron durante constelaciones o durante eternas noches mientras tú dormías. La ropa se acumula a los pies de la cama y no me canso de desvestirte, por que sí, esos pantalones te quedan de puta madre, pero los prefiero a mis pies. 
Hoy te despierto con el codo. (Desconecta el teléfono, hoy No pueden molestarnos)
Podría contarte las historias escrita a trazos sobre tus espalda o sobre tus lunares, también podría caminar entre los versos presos que mantienes al andar y que me recitas en cada revelación de amor. Podría hablar de cuando sonríes al ver mis caderas antes de verme a mi, de como consigo captar tu atención en el primer cruce de miradas o como puedo sorprenderte con magia barata y comprada en el fondo del último trago.
Podría contarte nuestra historia, pero está incompleta, tengo amnesia fingida about you, 'cause it's all about you, baby. 
Me hace gracia mi pronunciación en inglés o mi torpeza con el francés 
y como recitas esos poemas aprendidos en las clases a las que prestas poca atención, 
te aprendes los acordes de memoria y con un poco de distracción se te olvidan, 
pequeño desastre que eres mi amor.
Estas cuatro paredes huelen a besos embotellados o pasiones difundida en la red de tu mirada o el las regiones todavía por colonizar de tu cuerpo, y quiero ser un explorador en tu boca que se muere por surfear con sus dedos tu piel y deslizarse colina abajo sintiendo el salto al vacío que acaba de dar.