Vivo tratando de encontrar mi presencia en tus sueños, de que nos volvamos locos cuando estemos juntos. Lo cierto es que tampoco pido demasiado, solo que mires debajo de la mi cama todas las noches y me salves de laberintos sin salida y que tu dormir, sea a mi lado.Y que todos se mueran de la envidia cuando ellos estén encerrados con sus presagios y nosotros estemos partiéndonos el culo del azar y brindo por todo en este puto mundo que te hizo caer casi en mis manos. ¿Mi sitio? En la cama contigo. Y desde luego que serían buenos días si fueran contigo.
No te pido más que eso.
Un día tras otro viviendo hasta morir, pero no morir viviendo;
caminar lejos del suelo y del revés. Vivir de noche y soñar de día,
contar los insomnios con los dedos y poder decir:
Bienvenido de nuevo, viejo
Bienvenido a mi mar de ilusiones, mis sueños te guardan su correspondiente lugar del colchón cada noche. No te pido mucho como podrás saber. Drogarnos, ya sabes, esa costumbre. Fumar, ya sabes, ese vicio. ''Hacerte el amor y dejar que este nos haga estar así''.
